sábado, 6 de febrero de 2016

Las funciones armónicas: parte 2 (final)

Como ya vimos en la primera parte, cada acorde puede transmitirnos diferentes sentimientos como calma ( I ) o tensión ( V ) pero sinceramente esto es la base de la explicación de las funciones armónicas. Hay muchos acordes de diferente sonoridad que se pueden formar en un grado de una escala por lo que el cifrado francés (cifrado de grados) no es tan fiable en todos sus aspectos, ya que este es el cifrado que se utiliza actualmente en la mayoría de los conservatorios de música. Hay un cifrado más fiable pero con un grado de complejidad en su utilización, este cifrado principalmente se centra en las funciones armónicas, se denomina el cifrado funcional o alemán.

En este cifrado podemos tener una gran extensión de posibilidades sonoras y es el cifrado indicado para explicar en esta segunda parte de la entrada, según este cifrado se basa en tónica ( T ) subdominante ( S ) y dominante ( D ) y después las variantes del relativo menor o mayor, por ejemplo: el VI grado de una escala determinada suele ser Tp ( relativo menor ) o tP ( relativo mayor ).
(Nota: en el cifrado funcional las tonalidades mayores se escriben en mayúscula y lo contrario con las menores)

Ya una vez explicado brevemente el cifrado alemán, pasemos a la hora de la explicación. En el vídeo de la primera parte de las funciones armónicas hemos visto el acorde D de la D o V de la V esto quiere decir que la dominante de nuestra tonalidad utiliza su dominante. Este acorde es utilizado frecuente para las modulaciones a otras tonalidades o para recrear más tensión de lo que puede tener una dominante de la tonalidad principal. También hay otras variantes del acorde D de la D como la sexta aumentada que es una preparación a la dominante de nuestra tonalidad lo que implica más tensión que un acorde de D de la D. Hay otros acordes como por ejemplo V del II o la V del VII, estos acordes son acordes de la D secundarias cuya función es irse a una tonalidad diferente, implica más tensión que una D de la tonalidad pero menos que una D de la D; estos acordes son utilizados para dar más color a la armonía y confundir al oyente en que tonalidad estamos escuchando.

Finalmente hemos acabado las funciones armónicas básicas ya que hay muchas posibilidades armónicas combinando acordes que en su naturaleza no son tensos pero implican tensión según la dinámica que empleamos con ese acorde. De regalo os expongo otro vídeo de las funciones armónicas de una de las sonatas de Mozart. Entrada realizada por José Luis Serrano

No hay comentarios:

Publicar un comentario