sábado, 7 de mayo de 2016

¿Por qué recordamos nuestras canciones favoritas?

Hay canciones que no las sabemos de memoria no por su letra, sino también por su melodía, por los instrumentos de la canción y en los momentos claves de cada instrumento. La mayoría diría que todo esto es por la memoria de nuestro cerebro, pero no es en la memoria, exactamente es otra parte del cerebro que nunca pensábamos que podría ser.
Cuando acabamos una canción que nos gusta la terminamos recordando gracias a la parte del cerebro que nos hace caminar. Esta investigación fue realizada por un grupo de investigadores de una Universidad de Estados Unidos. Los resultados sugieren que el cerebro tiene un sistema especializado para recordar secuencias de información, no importa si son palabras o canciones.
Según Josef Rauschecker el principal investigador de esta teoría, se preguntó que región del cerebro le recordaba tanto a sus canciones de su grupo favorito: The Beatles. Él recordaba con exactitud cada parte instrumental, cada letra y cada melodía después de tantos años. Los científicos sometieron a Rauschecker y unos cuantos sujetos en exponerles sus canciones favoritos y después investigar en que parte del cerebro a tenido cambios. Para su sorpresa, el cerebro había tenido cambios en la parte motora del cerebro, la parte donde se coordina nuestros los movimientos de nuestras extremidades. Los investigadores realizaron otra prueba más a los sujetos pero esta vez con canciones nuevas que no habían escuchado antes. La área motora del cerebro sufría unos pequeños cambios después de escuchar la canción pero no permanecían tan inmóviles después de escuchar las canciones favoritas de cada sujeto.
"A medida que el cerebro procesa una secuencia conocida, las áreas motoras se activaron cada vez menos ", explica Green. Pero por otro lado, la secuencia, al hacerse más familiar, comienza a estimular el área que controla la audición.
Todo esto sugiere que las áreas involucradas en la audición pueden recordar pequeños fragmentos de las notas musicales, pero se necesita al sistema motor para organizar estos segmentos, explica Rauschecker. 
“Tiene sentido porque eso es lo que hace el sistema motor cuando se sigue una secuencia de baile o practicar algún deporte”, dice. “Cuando uno activa los músculos para estas actividades, suelen trabajar en una secuencia particular, especialmente cuando se aprende algo nuevo”.
“Cuando un músico se traba tocando una melodía en el piano, el no la continúa donde la dejó”, cuenta. “Normalmente, el músico vuelve a cierta parte y empieza de nuevo, porque la secuencia debe, de alguna manera, ser tocada”.Entrada realizada por José Luis Serrano

Los científicos averiguan el secreto de Freddie Mercury

Muchos nos preguntamos el porqué la voz de Freddie Mercury (cantante y pianista del grupo de Queen) es tan espectacular por su gran extensión de su registro vocal que le hace única en el mundo. Unos científicos de la universidad de Viena analizaron un análisis de unas 23 canciones de Mercury.

De acuerdo a los resultados, Freddie Mercury era un barítono que cantaba como tenor y mostraba tener unos signos que le aportaban una "vibración subarmónica", este fenómeno hace que el registro se llegué a su extremo.

El rango vocal de Mercury era normal de una persona adulta sana, el estudio comprobó que esas cuerdas vocales vibraban a una mayor velocidad que las de Pavarotti, un vocalista italiano profesional.

En concreto, el Doctor Christian Herbs, pivot del estudio, asegura que “estas características, en combinación con el vibrato rápido e irregular, podrían haber ayudado a crear el personaje excéntrico y extravagante que era Freddie Mercury”. Entrada realizada por José Luis Serrano

ocal que le hace única en el mundo.

La música facilita a los bebés que hablen.

Se ha realizado un estudio que comprueba que la música facilita a los bebés que hablen. Un grupo de investigadores estadounidenses compararon la evolución de dos grupos de recién nacidos: el primer estaba constituido por 20 bebés por debajo de los nueve meses a quienes enseñaron a reproducir ritmos musicales en un tambor y el segundo grupo estaba constituido por 19 bebés de la misma edad, pero estos recién nacidos se le entregaban otro tipo de juguetes no musicales como cubos o peluches. Una semana después los investigadores comprobaron a los bebés si han desarrollado una de las partes del cerebro. Se comprobó que las regiones del lenguaje del cerebro habían sido fortalecidas a causa de los instrumentos musicales y del ritmo que habían aprendido los del primer grupo.  El lenguaje tiene fuertes características rítmicas subrayan los investigadores. El ritmo de las sílabas ayuda a distinguir los sonidos y a comprender lo que dice una persona y es esa capacidad de identificar los diferentes sonidos lo que ayuda a los bebés a aprender a hablar.
"Nuestro estudio es el primero realizado en bebés que sugiere que el estar expuesto a ritmos musicales puede mejorar la capacidad de detectar los ritmos en el lenguaje", explica Christina Zhao, investigadora en el Instituto de Aprendizaje y Ciencias del Cerebro en la universidad del Estado de Washington .
Zhao es la principal investigadora de esta investigación que después lo publicó en la revista de la Academia de las Ciencias de Estados Unidos.
Entrada realizada por José Luis Serrano Sáez